Si. Así es. Un sencillo barco de papel.
Para aquellas personas que hayan visto "Ivanhoe, la disparatada aventura musical" sabrán que tiene mucho que ver con nuestro musical. No vamos a desvelar la razón para aquellos de vosotros que aún no lo habéis visto.
Pero queremos contaros que hemos elegido este barco de papel porque, a pesar de su fragilidad, va cargado de emociones, de ilusión, de mucho trabajo, de muchas horas de dedicación y del gran compromiso que este equipo de 50 personas le han dedicado a Ivanhoe durante el transcurso de todo este año y del que todavía queda, hasta que finalmente llegue a puerto.
El próximo será Pozuelo de Alarcón el día 29 de septiembre de 2017. Esto va a suponer otro sueño cumplido gracias al Ayuntamiento y a la Concejalía de Cultura de ese municipio, gracias a Fundación Gil Gayarre porque nos ha elegido, ha confiado en nosotros y nos ha regalado la participación en nuestros proyectos de teatro de lo más valioso que poseen: las personas, nuestros compañeros, gracias a las familias que comparten con nosotros los momentos mágicos y maravillosos del teatro y todo lo que ello conlleva y también los momentos menos mágicos, que también los hay. Y ¿cómo no?, gracias al público, nuestro público que nos acompaña en cada representación y que al final son ellos los que hacen posible que los teatros cobren vida.
Pero volvamos al barco. El próximo 29 de septiembre, en Pozuelo, y posteriormente en todos aquellos lugares a los que asista Ivanhoe, ese barco va a ir cargado con algo muy especial y se lo vamos a dedicar a alguien también muy especial: Javier García García, EL PREGONERO DE IVANHOE. Y así le vamos a recordar siempre.
La persona que mejor lo ha expresado ha sido su compañero Francisco Ramón López:
"Javi fue un compañero y amigo muy cariñoso que nunca dejaba de sonreír, siempre hablaba con sus compañeros a los que entregaba amistad y cariño, como sus compañeros a él. Siempre asistía a los ensayos, a los que nunca faltaba, le gustaba mucho el teatro y lo disfrutaba. Cuando salía a escena ya no era Javi porque se transformaba en el personaje que representaba y siempre disfrutaba haciendo teatro.
La relación entre nosotros era muy buena, incluso entre bastidores él se sentía a gusto entre nosotros. Era una persona feliz y se hacía querer por todos. Un verdadero amigo de todos nosotros, una buena persona.
Él no se fue. Sigue estando en nuestro recuerdo y quiero agradecer a su familia el habernos dado la oportunidad de conocer a una persona como Javi.
Su último trabajo es "Ivanhoe", pero sin duda alguna, para todos nosotros, Javi siempre será "EL PREGONERO".
Paco López